FASES DE LA INVENCIÓN
Las fases de la invención pueden resumirse en las
siguientes:
- EXPERTITUD:
El investigador o creador ha alcanzado un dominio de los
principales aspectos del problema y posee una gran cantidad de
información informal o formal al respecto.
- Percepción del
problema: Existe una fuerte sensación de
que existe un problema, de que algo no funciona, de que la
explicación aceptada no sirve o, en el caso de la creación
literaria y artística, una necesidad de comunicar una visión
nueva.
- Observación y
documentación: El creador o investigador
busca nueva información sobre el problema.
- Fijación e
incubación: El creador o investigador
alterna fases de concentración extrema en el problema con fases
de descanso en las que permite a su inconsciente trabajar en el
problema sin su atención.
- Iluminación:
El creador-investigador visualiza con ayuda de su cerebro
derecho la solución al problema. Se corresponde con la famosa
fase de Arquímedes "¡Eureka!".
- Formalización:
Con ayuda de su cerebro izquierdo, el creador-investigador
formaliza la solución y la expresa en el lenguaje de su
especialidad: modelos químicos, ecuación matemática, gráfico o
mapa, escrito, etc.
- Verificación:
El creador-investigador -y otros creadores-investigadores
posteriormente a su publicación- intenta replicar el
hallazgo y comprobar todos sus aspectos.
- Publicación:
El hallazgo es publicado en forma de obra literaria o artística,
de artículo científico, modelo o patente, etc.
- Difusión:
El hallazgo se difunde por el cuerpo social.
- Socialización:
La invención, creación o descubrimiento se incorpora al cuerpo
de conocimientos y herramientas cotidianas.
- Abandono:
La invención deja de ser útil o es superada por otra mejor, y se
deja de utilizar.
TÉCNICAS Y CONSEJOS PARA LA CREATIVIDAD
- Procurar el "diferencial creativo": Conseguir
distancia y perspectivas alternativas exponiéndonos a nuevas
ideas y situándonos en espacios, disciplinas, compañía,
lecturas, etc., distintos a los habituales.
- Suspender el juicio y centrarnos en producir soberanamente
ideas, sugerencias, conceptos, etc., con total espontaneidad y
libertad.
- Buscar alternativas, poner en cuestión las premisas, partir
de los resultados hacia atrás en vez de dejarnos arrastrar por
lo dado y por la fuerza de las premisas y el pensamiento lógico.
- Recurrir a la asociación libre de ideas, conceptos y
relacionales. Edward de Bono propuso el uso de la conjunción PO
para denotar la unión libre de conceptos frente al uso de otras
conjunciones restrictivas como no, o, y, etc.
- Realizar una revisión sistemática de un problema y de todas
las aportaciones a él, con el objeto de ver las contradicciones,
simplificar y alcanzar una perspectiva mejorada.
- Dividir un problema en sus mínimos componentes para a partir
de ahí probar nuevas reorganizaciones.
- Utilizar analogías y modelos de otros campos del
pensamiento. Así, por ejemplo, Freud utiliza la metáfora
hidráulica al explicar la psicología de las personas, hablando
de la fuerza que proviene del Ello y los mecanismos de bloqueo
de esa fuerza, que pueden llevar a la neurosis.
- Cambiar de perspectiva o rol, imaginando que nos ponemos en
las "botas" de otra persona. Una dinámica muy útil en
este sentido, es la propuesta por Bono de los "Seis
sombreros para pensar", que se desarrolla posteriormente.
- Realizar lluvias de ideas en solitario o con otras personas.
SEIS SOMBREROS PARA PENSAR (Edward de Bono)
La dinámica de los seis sombreros para pensar de Edward de Bono
es una dinámica de intercambio de roles que se apoya en el
análisis sobre los seis tipos de pensamiento que el autor propone,
y que son los siguientes:
- Sombrero
blanco: pensamiento de información.
- Sombrero
rojo: intuición y sentimiento.
- Sombrero
negro: cautela y lo negativo lógico.
- Sombrero
amarillo: lo positivo lógico.
- Sombrero
verde: esfuerzo creativo y pensamiento
creativo.
- Sombrero
azul: control del proceso mismo del
pensamiento.
A continuación presentamos la dinámica de forma gráfica.
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